LA CONVIVENCIA INTERNA ES RESPONSABILIDAD DE TODA LA COMUNIDAD EDUCATIVA

La Subdirección del Liceo se hace un deber en formular un importante y serio llamado a todos los integrantes de la organización escolar, en relación con los procedimientos que deben observarse rigurosamente, ante hechos de violencia que afecten a las personas que componen la comunidad educativa.

Dichos protocolos están publicados en el Menú principal de esta página web. Lo anterior, dada la ocurrencia de un lamentable suceso ocurrido hace un tiempo al interior del Establecimiento y que, a pesar de su carácter eventual, no es menos preocupante.

Las autoridades del Liceo están en conocimiento de que a un estudiante de 8º Básico un apoderado lo habría agredido por sindicarlo como autor de un golpe recibido por su hijo de Educación Básica.Los antecedentes han sido recogidos y analizados por las jefaturas respectivas, con el objeto de definir institucionalmente la situación.

En el contexto de reformulación de las políticas de Convivencia Escolar del Liceo, cuya sistematización se materializará el segundo semestre del año en curso, esta Subdirección considera indispensable hacer hincapié en el hecho de que padres y apoderados deben informar a las autoridades correspondientes sobre cualquier hecho irregular que se produzca entre alumnos(as) del Liceo (agresiones verbales, golpes u otros) y no ejercer, bajo ninguna circunstancia, acciones directas, amenazas explícitas o tácitas sobre los estudiantes involucrados. Este comportamiento no sólo no contribuye a solucionar el problema, sino que también constituye una falta grave, en tanto configura una acción coercitiva relacionada con abuso de poder, instalando -además- un conflicto entre adultos, todo lo cual obstaculiza la aplicación de los procedimientos y reglamentos internos del Liceo.

Profesores, funcionarios y apoderados deben constituir ejemplos de prudencia y sensatez en circunstancias como las aludidas, de manera de contribuir efectivamente al mejoramiento de nuestra convivencia interna y a la formación íntegra de nuestros niños y jóvenes.